Las lentes de contacto son una opción cómoda, estética y segura para quienes desean corregir su visión sin depender de las gafas.
En Óptica Vilamarxant, llevamos años ayudando a nuestros pacientes a disfrutar de una visión clara y natural con la adaptación y seguimiento personalizados de sus lentillas.
Si estás pensando en probarlas o ya las utilizas, este artículo te ayudará a conocer sus principales beneficios y consejos prácticos para sacarles el máximo partido.
A diferencia de las gafas, las lentillas se mueven con tus ojos, proporcionando una visión sin distorsiones ni reflejos.
Son ideales para actividades que requieren precisión visual o movimiento constante, como el deporte o la conducción.
Una vez bien adaptadas, las lentillas ofrecen una sensación ligera y casi imperceptible.
Permiten realizar actividades físicas sin preocuparse porque se empañen, se caigan o se rompan, como ocurre con las gafas tradicionales.
Muchos usuarios valoran la posibilidad de mostrar su rostro sin gafas, lo que puede aumentar la confianza en situaciones sociales o laborales.
Además, son compatibles con gafas de sol sin graduar, lo que amplía las opciones de estilo.
Existen lentes de contacto para miopía, hipermetropía, astigmatismo o presbicia (vista cansada), por lo que prácticamente cualquier persona puede beneficiarse de ellas con la supervisión adecuada.
Son una gran opción para eventos, actividades deportivas o viajes, donde la comodidad y la estética son importantes.
Lávate y sécate bien las manos antes de manipular las lentillas.
Evita el contacto con agua del grifo, cremas o maquillajes mientras las colocas.
Usarlas más horas de lo recomendado puede causar sequedad o irritación ocular.
Sigue siempre las indicaciones de tu óptico-optometrista y sustituye las lentillas según la frecuencia indicada (diarias, quincenales, mensuales…).
Si notas sequedad, puedes utilizar lágrimas artificiales compatibles con lentes de contacto.
También es importante parpadear con frecuencia, especialmente si pasas mucho tiempo frente a pantallas.
Renueva el líquido de mantenimiento cada día y cambia el estuche cada 1–3 meses.
Una buena limpieza previene infecciones y prolonga la vida útil de las lentillas.
La graduación y la forma del ojo pueden variar con el tiempo.
Una revisión visual en Óptica Vilamarxant al menos una vez al año garantiza una adaptación perfecta y una visión cómoda y segura.
Las lentes de contacto ofrecen comodidad, libertad y una visión natural, siempre que se usen con una buena higiene y bajo control profesional.
En Óptica Vilamarxant, te asesoramos de forma personalizada para que disfrutes de todas sus ventajas de manera segura.
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